El mundo en el que vivimos tiene muchos ecosistemas, desde ríos y lagos hasta bosques y valles. Animales, plantas y microorganismos habitan en estos ecosistemas. Los elementos no vivos como el agua, el aire, el suelo y las rocas también están presentes en ellos. Desde una perspectiva ecológica, podemos clasificar estos componentes ambientales en dos tipos: factores bióticos y factores abióticos. Descubriremos qué son los factores abióticos en un ecosistema.
Los factores abióticos son los componentes no vivos del ecosistema. Estos incluyen factores como el viento, el agua, la luz solar, el suelo, la temperatura y la humedad. Los factores abióticos pueden ser componentes químicos o físicos de un medio ambiente. Los factores abióticos tienen el potencial de afectar a todos los organismos vivos con respecto a su crecimiento, reproducción y supervivencia.
Los factores abióticos en un ecosistema son los siguientes:
Tenga en cuenta que la lista de factores abióticos puede cambiar según el ecosistema. Por ejemplo, las ondas de sonido y la presión también se pueden considerar como un factor abiótico en los ecosistemas marinos o subterráneos.
Los factores abióticos son los componentes no vivos de un ecosistema.
Los factores abióticos de un ecosistema son el agua, la temperatura, la humedad, la atmósfera, la luz, la acidez, el suelo, los niveles de oxígeno, la turbidez, la presión y las ondas sonoras.